DIGAN LA VERDAD

DECIR LA VERDAD

"Honren a Cristo como Señor, y estén siempre listos para explicarle a la gente por qué ustedes confían en Cristo y en sus promesas. Pero háganlo con amabilidad y respeto".  (1 Pedro 3:15-16a)

   1- Sean reverentes (respetuosos)

"Honren a Cristo en vuestros corazones como Señor". Hay una gran diferencia entre recibir a Cristo como salvador y hacerlo Señor de nuestra vida.

Nuestro deseo sincero es permitir al Señor de "Toma mi vida y conságrala, Señor, a ti". Pero, generalmente, después que depositamos nuestra vida sobre el altar, resbalamos (caemos) de nuevo a causa de nuestro pecado. Tal vez todavía tenemos un problema en vivir día a día con Cristo como nuestro Señor. No busquen (busquemos) una solución fácil, no existe.

Es una decisión diaria de parte nuestra de rendir con reverencia nuestra vida al Señor Jesús para que nos use o no nos use, como Él quiera.

Con Cristo como Señor, nuestros intentos de decir la verdad serán eficaces.

   2- Estén prontos (preparados)

"Estén siempre listos (preparados)...". Depende de nosotros estudiar las Escrituras atentamente. Lea mucho, no solo libros cristianos, también las obras de aquellos hombres y mujeres que han influenciado las vidas del mundo.

Esto fortificará enormemente vuestra fe y se asegurarán de estar prontos (preparados - listos) a dar una respuesta cuando sea necesario.

   3- Sean razonables

"... da una respuesta a cualquiera que te pregunte...". Es aquí cuando nuestro testimonio de fe impactará, cuando somos razonables. (Damos nuestras razones)

Sean razonables; expliquen los que les ha sucedido, poniéndose en el puesto de quienes les escuchan. ¡Recuerden que él (ella) es ciego(a), muertos y víctimas del enemigo! Debemos remover, quitar, todas las barreras de comunicación de nuestra parte.

   4- Sean veraces (fieles)

"... Para dar cuenta de la esperanza  que tienes...". Cuando decimos la verdad, debe ser real para nosotros. ¿Alguna vez han sentido a personas contar su propia historia y sentir que de cualquier manera no están diciendo la verdad? ¡La gente habla tanto de su propio pasado pecaminoso que se preguntarán si se han arrepentido de haber puesto su fe en el Señor! Pienso que se sienten obligados a contar una historia dramática. Sin embargo la mayor parte de nuestra vida es muy simple; ¡esta es la verdad! Si decimos la verdad de lo que Jesús ha hecho y está haciendo en nuestra vida, dándole la gloria a Él, nuestros vecinos escucharán.

   5- Sean gentiles

"... Pero háganlo con gentileza..." Si discutimos agresivamente, probablemente venceremos la discución, pero casi seguro que perderemos a la persona. Con gentileza venceremos la causa.

   6- Sean respetuosos

"... Y respeto..." Muchas personas han perdido el respeto de si mismos. Una baja autoestima, el despido del trabajo, el divorcio, la incapacidad, han empujado a nuestros amigos atrás de su propia puerta cerrada.

¿Quién andará a los ancianos, los discapacitados, los culpables, las personas solas, las desmoralizadas? Pasar tiempo con ellos, mostrando respeto y amor y, tarde o temprano, habrán la posibilidad de compartir el Evangelio.

   7- Sean los segadores

¿Alguna vez han condividido el Evangelio o vuestra experiencia con el Señor y después le han dicho a vuestro amigo: "Te gustaría recibir al Señor? ¿Es demasiado directo para ustedes? Y le dirías a algo así como "¿Hay alguna razón por la cual tu no debes poner tu fe en Cristo?...